La guía definitiva para evitar que el Dragón te muerda… y no justamente por buena suerte.
Cuando se trata de hacer negocios con China, todo empieza igual: encuentras un proveedor que promete “calidad premium AAA+++ original de fábrica”, fotos de almacenes gigantescos y un vendedor que escribe en un español perfecto hasta que le pides una videollamada… y de pronto responde como si fuera Google Translate con fiebre.
Así que surge la pregunta del millón (o del conteiner):
¿Cómo saber si esa empresa china existe de verdad o solo es un ninja del fraude?
Relájate. Aquí te dejo la guía que separa al proveedor real del Kung-Fraude.
1. Comprueba su registro oficial en la Plataforma Nacional de Publicidad de Crédito Empresarial (NCCP / 国家企业信用信息公示系统)
La herramienta más importante y barata del mundo: gratis, oficial y sin trucos.
Aquí puedes verificar:
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Nombre legal de la empresa
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Número de registro (Unified Social Credit Code – USCC)
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Fecha de creación
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Tipo de actividad
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Representante legal
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Historial de sanciones o advertencias
Si la empresa no aparece aquí, no pierdas tu tiempo: huye más rápido que Jackie Chan en escena final.
2. Revisa el USCC: el DNI empresarial chino
Todo negocio formal en China tiene un USCC de 18 dígitos.
Ejemplo: 91350211MA31W49XXQ
Este código revela:
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Provincia
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Tipo de organización
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Número de registro
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Dígito de control
Si el proveedor te da un número con menos dígitos que contraseña de WiFi de hostal… sospecha, sospecha mucho.
3. Pide la “Business License” (营业执照)
La licencia comercial es un documento donde aparece:
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Nombre legal
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Dirección exacta
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Línea de negocio
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Representante legal
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Fecha de inicio
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QR oficial para verificar en el sistema público
Dato divertido pero útil: los chinos aman los sellos rojos redondos.
Si te mandan una licencia sin el sello rojo… es tan falsa como una Gucci de 40 yuanes.
4. Revisa la dirección con Baidu Maps (el “Google chino”)
Si la empresa dice tener “fábrica con 5000 m²” pero en Baidu Maps aparece un edificio residencial, o peor, un restaurante de hot pot… probablemente tu mercancía terminará tan desaparecida como tus ilusiones.
5. Verifica el nombre en chino, no solo en inglés
Error de novato:
Verificar “Golden Dragon Import & Export Co., Ltd.”
En China hay 742 empresas con nombres parecidos.
Necesitas el nombre EXACTO en chino mandarín:
Ejemplo: 金龙进出口有限公司
Si un proveedor se niega a darte su nombre en chino, estás tratándolo con un fantasma empresarial.
6. Pide un “Bank Account Certificate” del banco chino
No aceptes cuentas personales ni cuentas de Hong Kong si dicen ser fábrica de la “China continental”.
Un certificado bancario auténtico debe incluir:
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Nombre legal de la empresa
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Número de USCC
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Dirección
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Sello del banco
Dato suspicás: muchos estafadores usan cuentas personales tipo “Zhang Wei”. Si vas a enviar miles de dólares, que no sea a un “Zhang Wei” que podría ser cualquiera de los 30 millones con ese mismo nombre.
7. Rastrea el historial de exportación (si existe)
Sitios como:
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ImportYeti
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Panjiva
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QCC (企业查查)
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Tianyancha (天眼查)
Estos portales muestran:
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Clientes previos
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Registros de exportación
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Años de operación
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Riesgos legales
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Demandas
Si una empresa dice exportar desde 2004 pero no aparece en ningún historial…
Pues sí: Kung-Fraude detectado.
8. Pide una videollamada… pero dentro de la fábrica
Recomendación experta:
“Por favor, muéstrame el taller de producción, el almacén y las máquinas en tiempo real.”
Si el proveedor se niega con excusas como:
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“Internet malo”
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“La fábrica está cerrada justo hoy”
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“Mi cámara no funciona”
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“El jefe no permite grabar”
Traducción real:
No tenemos fábrica. Tenemos Photoshop y muchos sueños.
9. Verifica si están en la lista negra de Aduanas o del gobierno chino
Sí, China publica una lista negra de empresas sancionadas por:
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Fraude
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Contaminación
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Incumplimientos legales
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Problemas fiscales
Si están ahí…
Corre como si te persiguiera un dragón con hambre.
10. Señales clásicas del Kung-Fraude
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Ofrecen un precio demasiado bajo para ser real
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Responden muy rápido… a cualquier hora (bots, intermediarios o alguien desesperado)
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El vendedor cambia su nombre cada semana
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Demasiados modelos y productos distintos (nadie fabrica llantas y juguetes a la vez…)
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No aceptan Alibaba Trade Assurance
Conclusión suspicás:
Comprobar si una empresa china está registrada no es difícil. Difícil es aceptar la verdad cuando descubres que ese proveedor tan amable era más falso que un billete de 3 yuanes.
Pero si sigues estas reglas, podrás negociar con China sin miedo a caer en el temible Kung-Fraude, y hasta encontrarás proveedores serios que sí cumplen… aunque respondan mensajes a las 3 a.m. (China nunca duerme, tú sí deberías).

